Red de Vida

Cercanos

Pastora Maureen Herrera – Domingo 18 de Abril 2021

En nuestro caminar con Dios, una vez que lo aceptamos en el corazón, empezamos a desarrollar una relación con Él. Entonces, Dios deja de ser una figura lejana y se vuelve alguien de confianza a quien no nos da pena acercarnos. Es un hecho que al estar en pecado sentimos a Dios distante porque el pecado nos separa de Él, pero ahora por medio de Cristo, tenemos libre acceso a su presencia. A través Jabes, aprendemos dos cosas que obtenemos cuando nos acercamos a Dios.

E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: !!Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió.

1 Crónicas 4:10

A. Cambio de historia

Jabes fue un descendiente de Judá que solamente es mencionado una vez en medio de una genealogía no por un acto heroico sino por un acto de fe. Se menciona que su madre le puso por nombre Jabes porque lo dio a luz con dolor. En el idioma hebreo, su nombre tiene un sonido similar a una palabra que significa estar confuso, avergonzado, desilusionado, fracasado, seco, destruido, extinto o marchito. Sin embargo, y a pesar de tal peso y marca desde su nacimiento (dolor) Jabes no se detuvo a sentirse definido por esos calificativos, sino que clamó al único que podía cambiar su historia. Jabes pudo haberse sentido mal por el significado de su nombre; una marca que quizá lo persiguió desde niño, pero decidió acercarse a Dios y por eso llegó a ser el más ilustre de sus hermanos.

Al igual que Jabes arrastramos marcas de soledad, sequedad espiritual, pecados ocultos, tristeza, depresión. Arrastramos vergüenza, fracaso y oscuridad. Esto es producto del pecado y es usado por Satanás para alejarnos de Dios y destruirnos. Sin embargo, Jesús vino para deshacer las obras de las tinieblas. Cuando nos acercamos a Él lo que estaba sentenciado para nosotros queda anulado a través de su sacrificio en la cruz.

B. Oraciones contestadas.

Una vez que nos acercamos a Dios, tenemos la confianza para pedirle a Él lo que necesitamos. Nos acercamos a quien le tengamos confianza (Hebreos 4:16)

¡Qué lindo es saber que tenemos acceso libre al Padre, que podemos pedir con confianza!

Jabes pidió 4 cosas muy claras: Bendición, ayuda en el trabajo, acompañamiento y protección.

Quien anda lejos, se siente autosuficiente, pero quien se acerca a Dios, reconoce que solo cuando Él es el centro, le irá bien. Dios quiere contestar nuestras oraciones, darnos consuelo, escuchar nuestro clamor, suplir nuestras necesidades o simplemente llenar el corazón. Lo único que debemos hacer es tomar la decisión de venir a Él. (Salmo 34: 15;18)

En conclusión, Dios quiere que te acerques a Él de manera confiada al punto que cambie tu historia, sane tus heridas y responda a tus peticiones.

Cercanos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *