Pastor Walner Fallas – Domingo 23 de mayo 2021
Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo.
1 Pedro 5:8-9
Hoy hablaremos de la importancia de estar atentos a la realidad que debemos enfrentar cada día como cristianos. Nos referimos al peligro que representa el enemigo de nuestras almas, el diablo. Y como a través de sus trampas o emboscadas intenta destruirnos. Por esta razón, debemos atender el consejo del apóstol y poner por obra las acciones necesarias que nos pueden llevar a lograr obtener una victoria segura ante sus constantes asechanzas.
El primer pensamiento que consideramos importante resaltar es “No subestimes al enemigo”.
Pedro hace referencia en el vs.8 que nuestro adversario, anda como león buscando a quien devorar. Si de algo debemos ser conscientes es que el diablo NO tiene misericordia. Cuando hablamos de subestimar nos referimos a que algunos minimizan su odio, olvidando Juan 10:10 “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir…” recuerda, el disfruta lo que hace y lo intentará contigo. Además, es comparado como un león que busca su presa, o sea aquellos que caminan desapercibidos de su presencia y que no tomaron la debida precaución para salir ilesos del mal. Efesios 4:27exhorta a no dar lugar al diablo, pues entre más cerca está de su presa más efectivo y letal será su ataque. Por tal motivo no abras puertas por donde él pueda entrar y mucho menos entres en su territorio, este mundo el cual gobierna y seduce con ofertas impregnadas de veneno mortal. Considera Proverbios 12:28 “En el camino de la justicia está la vida; y en sus caminos no hay muerte”. Dios quiere librarte de la mano del cazador, pero debes ser prudente y obedecer a sus consejos.
Teniendo en cuenta lo anterior considera bien este segundo punto “Anticipa la asechanza”.
Hay una necesidad apremiante, Pedro dice “sed sobrios y velad…” dos palabras cortas que pueden ser dinamita en contra del enemigo y que nos ponen precisamente en alerta. Cuando anticipamos podemos anular los planes del maligno, pero esto se logrará si decidimos consagrarnos al Señor, doblando rodilla e intercediendo por nuestras vidas y familia, parados en la brecha con una fe viva y llena de confianza en la protección que Dios da a cada uno de sus hijos. El rey David entendía bien la ventaja de estar apercibido y oraba de esta manera: “Jehová Dios mío, en ti he confiado; sálvame de todos los que me persiguen, y líbrame, no sea que desgarren mi alma cual león, y me destrocen sin que haya quien me libre” Salmos 7:1-2. Fácil es descuidarse y muchos lo hacen cayendo en las trampas del mal, pero debes perseverar y morir a tu debilidad. Jesús llamó la atención a sus discípulos en Mateo 26:41 “Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil”. No es tiempo de dormir, el enemigo está al asecho, levántate de tu sueño y pelea la batalla con valor.
Por último “Resiste al enemigo”. En el vs.9 leemos “al cual resistid firmes en la fe”, si algo quiere Dios de nosotros es que adoptemos el carácter de un guerrero para enfrentar los ataques del enemigo y no un espíritu débil que solo sabe soportar sus embates, pero sin responder con autoridad. Recuerda 2Ti 1:7 “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”. Resistencia significa: “oponerse, luchar”, así que no hay tiempo que perder en una batalla, en cuanto comienza debes actuar para no dar ventaja. El enemigo asecha y por eso siempre habrá oposición. Además, debes entender que tú no eres el único que vive en pruebas y luchas, Pedro dice que todos estamos pasando enfrentamientos “sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo”. Por tal motivo toma aliento y sigue adelante si otros pueden tú también lograras vencer toda adversidad. Declara con tu boca y cree en tu corazón que todo lo puedes en Cristo que te fortalece y si Dios es contigo quién contra ti. Estas son las promesas que deben alimentar tu vida y no aceptar las mentiras del diablo cuando quiera convencerte que tú no puedes llegar a la meta. Cada día estamos más cerca de nuestra redención y el enemigo lo sabe, no te rindas y afirma tus pies en Cristo la Roca de nuestra salvación y no olvides Santiago 4:7 si nos sometemos a Dios y resistimos al diablo el huirá de nosotros.